top of page
tumba de dioses.jpg

Título: Tumba de dioses

Autora: Jay Kristoff

Editorial: Plaza y Janés

Páginas: 560 

ISBN:  978-8401021251

Precio:  17,94€

Sinopsis

Mia Corvere ha encontrado su lugar en la Iglesia Roja, la famosa escuela de asesinos. La joven se halla entre los elegidos de la Señora del Bendito Asesinato, aunque muchos creen que no lo merece.

Mia juró venganza pero aún no ha cumplido su palabra. Cuando sospecha que la propia Iglesia está impidiendo que acabe con el hombre que mató a su familia, se vende a sí misma a un reclutador de gladiadores para poder enfrentarse a él.

En los pasillos del coliseo hace nuevas amistades y nuevos rivales, y empieza a preguntarse por su afinidad con las sombras. Pero a medida que se urden conspiraciones, se revelan secretos y arranca el recuento de cuerpos, Mia se ve obligada a elegir entre lealtad o venganza, y su elección será clave para la tierra en la que sus tres soles casi jamás llegan a ponerse.

Opinión personal

IMG_20181013_115151.jpg

A mí Jay Kristoff quiere matarme de un infarto. ¿Alguien más siente lo mismo por aquí? Las alabanzas que pueda hacer de su enrevesada forma de escribir no serías exageras y puede que incluso le hicieran justicia.

No suelen apasionarme los libro en exceso violentos, pero este, en el que se detallan y se desgranan los intensos momentos de lucha como si fueran cebollas con capas y donde se especifican a qué huelen las entrañas o la mierda de una persona que acaba de morir, no sé por qué pero me encanta.

Está claro que lo que me hace tolerable todos estos momentos de violencia exacerbada es la historia de nuestra protagonista: Mia Corvere. Y bueno, no le quitemos méritos, también su personalidad. Honestamente, la amo. Muchísimo.

La primera parte de esta saga me dejó vacía, triste, cabreada, enganchada… El final de esta segunda parte es tan apoteósico que no sé cómo me siento. De verdad, han pasado 3 días desde que lo acabé y aún no lo sé.  Lo único que puedo deciros es que esta mierda es adictiva… A unos niveles insospechados. Lo juro. Aunque hay algo notablemente diferente, en cuanto a mis sentimientos se refiere, con respecto al primer libro y el anterior.

En “Nuncanoche”, como bien os he dicho antes, acabé sufriendo muchísimo. Sentía un intenso odio hacia Jay Kristoff como no lo había sentido por nadie en mucho tiempo. No se puede jugar así con mis sentimientos. Sin embargo, en el segundo, a pesar de que me haya explotado el cerebro con el final, ahora le quiero más. Jay Kristoff me ha hecho sufrir, pero en cierta manera me ha recompensado.

Sé que hablar de forma tan críptica sobre una saga debe ser algo frustrante para vosotros, pues, en verdad, no estoy contando una mierda de la historia. Pero… Así deben ser las cosas, gentiles amigos (copiando a Kristoff), pues la magia de esta historia está en leer sin saber en el puto embrollo que te has metido. Sé que no estáis acostumbrados a que me líe a soltar palabrotas en mis reseñas, pero Jay es un malhablado y hay una palabrota por cada cinco palabras en sus libros, es imposible acabar de leer y que no se te pegue, al menos durante unos días. Os prometo que tras esta reseña dejaré atrás tanta vulgaridad (hasta que lea la tercera parte de la saga, claro).

Valoración

bottom of page